Alberto Arrúa cruzó a Cristina Kirchner, después que la ex Presidenta lo incluyera entre los peronistas que con su ausencia permitieron que Milei pueda mantener su veto contra el financiamiento a las universidades. El diputado misionero retomó la metáfora acerca del peronismo «torcido» y planteó que, tras la crisis del 2001, el PJ necesitaba un «tutor para crecer derecho», tal como se hace con los árboles recién plantados.
Miembro del Frente Renovador de la Concordia Social (FRCS) misionero, Arrúa le reprochó a Cristina el modo de «construcción política». «Quizás lo torcido tiene muchas causas, entre ellas la forma de construir política de un espacio de dirigentes que hoy la rodean creyendo que se pueden arrogar la capacidad de ‘enderezar’ lo que ellos torcieron», le reprochó a través de su propia cuenta en X.
Además, el legislador fue a fondo con una pregunta: «¿Le interesa enderezar lo torcido o podar al peronismo de las ramas que le molestan y quedarse con un arbolito a la medida de La Cámpora?», expresó. Y aclaró que formulaba ese razonamiento asumiendo que él mismo había sido «parte fundacional de la orga en Misiones», en referencia a la agrupación que lidera Máximo Kirchner.
Arrúa agregó también que «algunos peronistas» creen que «hay que cambiar de tutor», una alusión directa al anuncio de Cristina sobre su intención de presidir el PJ. «Fui fundador de La Cámpora en mi provincia y después de muchos años me fui porque dejó de ser lo que decían ser», sostuvo.
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La ex Presidenta había señalado a Arrúa, sin nombrarlo, cuando posteó este jueves en Twitter que en los portales de noticias «se puede ver la carita sonriente y los deditos en V de otro diputado del peronismo de Misiones que hizo lo mismo» que la diputada por Catamarca Fernanda Ávila, para ayudar al gobierno a sostener el veto.
Pero Cristina no se quedó ahí. «Ese legislador (por Arrúa) es, además, Secretario General del Partido Justicialista en la provincia de Misiones y no sólo había votado el financiamiento universitario, sino que prometió públicamente rechazar el veto de Milei», remarcó, y concluyó que «por alguna desconocida alquimia, terminó siendo uno de los 5 votos peronistas que, de haber cumplido con su mandato, habrían dejado sin efecto aquel veto y hoy la universidad tendría financiamiento, sus facultades no estarían tomadas y los docentes y estudiantes en clase».
Arrúa había declarado en Futürock que no respaldaría el veto, tan solo dos días antes. «Yo no voy a apoyar el veto de Milei y como peronista no apoyo ninguna de las políticas que está realizando», manifestó, y hasta deslizó que sus otros tres colegas del FRCS harían lo mismo.