El neurocientífico y diputado nacional, Facundo Manes, no perdió el tiempo en las semanas de verano y dejó en estado embrionario a su iniciativa por liderar a la Unión Cívica Radical, con un camino que se inició con la posibilidad de conducir el bloque legislativo, pero que quedó frustrada con la elección del cordobés Rodrigo De Loredo.
Quienes ven la “media copa llena” se regocijan con un punteo virtuoso de apoyos que el legislador obtuvo en su “metier” por conquistar la máxima representación de esa bancada en la cámara baja. Esto es porque, en el mientras tanto, fue acrecentando empatía con importantes referentes y hasta dejó algunas huellas políticas interesantes que configuran un importante punto de partida.
LÍNEA DE DIÁLOGO
Manes perdió frente a la compulsa con Rodrigo De Loredo, pero quedó en buena línea de diálogo con varios de sus pares entre quienes están los incondicionales como el bonaerense Pablo Juliano y otros que, comulgando en los mismos estilos, tienen que seguir dialogando para armar un consorcio con finalidades comunes.